29 de septiembre de 2019

Finaliza con un acuerdo la huelga indefinida de los trabajadores del Grupo Godoy de Níjar


El Soc-SAT considera ganada la huelga y un avance importante en el reconocimiento de los derechos de los trabajadores del campo
San Isidro / NÍJAR 27 sep – Trás cumplirse casi un mes de huelga indefinida de la plantilla de los  trabajadores agrícolas de Invernatur y AJVF del Grupo Godoy de los Campos de Níjar,el pasado viernes 27 de septiembre la asamblea de trabajadores reunida en la sede del Sindicato de Obreros del Campo - Sindicato Andaluz de Trabajadores/as ( Soc-SAT ) en San Isidro  aprobaba el acuerdo alcanzado con la empresa y daba por terminada la Huelga.
«Se alcanzó un acuerdo – afirman fuentes del sindicato – los trabajadores huelguistas se pueden reincorporan al trabajo. La empresa reconoce el Salario Mínimo Interprofesional. Los trabajadores de la empresa ven reconocidas las reivindicaciones planteadas al inicio de la Huelga y recibirán sus atrasos desde febrero hasta septiembre. Se pasa a cobrar el jornal a 6’90 € (según convenio). Se ha ganado la huelga».

Un mes de huelga indefinida que parecían de telenovela

La huelga del Grupo Godoy comenzó el pasado 29 de agosto al negarse la empresa a cumplir con los acuerdos adoptados a principios de enero en otro conflicto laboral y despedir a trabajadores.
Desde ese  momento hemos visto de todo: huelguista en la puerta de la finca comiendo un cuscus bajo una carpa. Un empresario,  «tan dialogante» que intentaba expulsarlos martillo en mano. Voluntarios de Interbrigadas venidos de Alemania para darles apoyo. Asambleas. Dos manifestaciones, en San Isidro y El Ejido. Caja de resistencia. Sindicalistas detenidos. Medios de comunicación internacionales interesados en conocer lo que ocurre «bajo los plásticos de Almería», y el silencio de otros medios de comunicación locales y nacionales. La presencia del diputado Diego Crespo. La actuación contundente de la Inspección de Trabajo llenando un furgón de trabajadores «esquiroles» con la asistencia de la Policía Nacional. Y la discutible actuación de la Guardia Civil, uno de cuyos agentes se posicionaba claramente con la empresa. Y coches que intentaban pasar a «trabajadores ilegales» en los maleteros. Además de piquetes a los que se les causó algún herido. Un conflicto al que solo ha faltado el milagro de alguna Virgen que recordara a sus hijos de los invernaderos.  La plantilla ya preparan una fiesta abierta de celebración posiblemente esta próxima semana.

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